Control Conyugal y Toma de Decisiones Intrafamiliar en Filipinas
- Men and boys
- Women and girls
- Women’s/girls’ decision-making
- Gender attitudes and norms
- Savings
Problema de política pública
La creciente literatura sobre la negociación intrafamiliar, da cuenta que los aumentos en la participación femenina en el ingreso, independiente de cualquier otro cambio, entrega a las mujeres más poder dentro del hogar. Esto puede llevar a una asignación de recursos que refleja mejor las preferencias de las mujeres, incluyendo educación, vivienda y alimentación de los niños. Investigaciones anteriores respecto de la toma de decisiones familiares, han tomado el hogar como una sola unidad o han asumido que existe una perfecta comunicación entre los cónyuges. Pero los supuestos más realistas, como la posibilidad de información privada o una comunicación limitada entre los cónyuges, entregan una mejor comprensión de cómo se toman las decisiones. Dada las potenciales diferencias en preferencias e información entre los cónyuges, las condiciones particulares bajo las cuales se toman las decisiones familiares, puede que tengan una gran importancia para las decisiones económicas y para los resultados familiares.
Contexto de la evaluación
En Filipinas, 30% de la población vive bajo la línea de la pobreza a nivel nacional y vive principalmente de la entrega servicios y del sector agrícola.1 Tradicionalmente, los hombres pasan sus ingresos a sus esposas para efectos de presupuesto y distribución de los mismos, pero las mujeres a menudo se quejan que sus esposos no entregan el total de sus ingresos. Esto implica que, si bien las esposas tradicionalmente administran las decisiones financieras de la familia, los esposos a menudo tienen preferencias divergentes respecto de cómo se debieran gastar los ingresos.
Detalles de la intervención
Con el propósito de identificar cómo afecta la información y comunicación en las decisiones intrafamiliares, los investigadores diseñaron un estudio de campo, en el cual las parejas intentaron tomar decisiones con diferentes grados de privacidad y capacidad de negociar. Los experimentos se aplicaron a 146 matrimonios en las salas de conferencia del Green Bank, un banco rural privado en Mindanao.
A los clientes existentes del Green Bank, se les pagó una pequeña cantidad por participar y fueron asignados aleatoriamente a uno de los tres ambientes, bajo los cuales tomaron decisiones de ahorrar o gastar una cierta suma de dinero entregada.
i) Ambiente Privado: Los sujetos fueron separados de sus cónyuges, de manera que el dinero entregado, las decisiones tomadas y los resultados no fueron compartidos con los cónyuges.
ii) Ambiente Público: Los sujetos y sus cónyuges entraron juntos a una sala, aprendieron sobre sus propios ingresos y elecciones, y también los ingresos y elecciones del otro, y tomaron decisiones simultáneas. Sin embargo, no pudieron comunicarse entre sí y ver las decisiones del otro, hasta después de haber tomado sus propias decisiones.
iii) Ambiente de Negociación: Los sujetos y sus cónyuges siguieron el mismo procedimiento “publico” anterior, pero pudieron comunicarse antes de tomar sus decisiones, siendo sus decisiones observadas inmediatamente por el otro.
A los sujetos se les entregó una donación de 200 pesos (US$4), el equivalente al ingreso diario, al final del experimento y otros 200 pesos en un periodo de tres meses. Durante el experimento, se les pidió a los sujetos que tomaran varias decisiones anticipadamente, sobre lo que les gustaría hacer con su donación inmediata y futura. Los sujetos tenían tres elecciones: (i) una de dos opciones de consumo (200 pesos en forma de certificado de regalo para vestimenta o en forma de certificado para alimentos), (ii) depositar los 200 pesos en su propia cuenta o (iii) depositar los fondos en la cuenta de su cónyuge.
Resultados y lecciones de la política pública
En el ambiente privado, 51% de los hombres prefirió depositar directamente el dinero en sus propias cuentas, en vez de en la cuenta de su esposa (23%) o usarlo en consumo (25%). Sin embargo, cuando la información sobre los resultados se hizo pública, 60% de los hombres escogió comprometer su dinero en consumo en vez de depositar el dinero en su propia cuenta (21%) o en la cuenta de sus cónyuges (19%). En cambio las mujeres no varían en las diferentes condiciones de tratamiento en su deseo de depositar el dinero en una cuenta en vez de comprometerlo en consumo. Sin embargo, sí cambiaron de depositar en sus propias cuentas cuando la toma de decisiones fue en privado a depositarlo en la cuenta de su cónyuge cuando la toma de decisiones fue pública.
La evidencia demuestra que el ambiente en la toma de decisiones intrafamiliar tiene un impacto significativo en los resultados finales. Este efecto es principalmente inducido por los hombres cuyas esposas toman las decisiones de ahorro en el hogar: cuando se les da la oportunidad, ellos escogen usar los ingresos para el consumo más que ahorrarlos. Sin embargo, este efecto parece estar inducido por el poder de toma de decisiones más que por el género: las mujeres cuyos esposos controlaron las decisiones de ahorro se comportaron como los hombres cuyas esposas controlaron los ahorros. Finalmente, los hombres fueron más proclives a pasar su dinero a las cuentas de sus esposas en el ambiente de negociación, un efecto que se mantuvo en todos los individuos quienes, independiente del género, no estaban en control de las finanzas del hogar.
Estos resultados sugieren que los cónyuges con diferente información sobre los ingresos familiares pueden crear incentivos para no hacer públicos los fondos. De este modo, cualquier intervención que cambia la información disponible para los miembros del hogar debe reconocer los impactos que esto puede tener en la distribución de los recursos dentro del hogar.
1 As of 2003. CIA World Factbook, “Philippines: Economy,” https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/geos/rp.html. (Accessed December 2, 2009)