Comprobando la Efectividad de Pagos por Servicios de Ecosistemas en Uganda
- Rural population
- Deforestation
- Climate change mitigation
- Natural resource management
Problema de política pública
La deforestación contribuye alrededor del 25% de las emisiones de gas invernadero a nivel global cada año. Reducir la deforestación en los países en desarrollo es potencialmente una manera costo-efectivo para reducir las emisiones de carbón y combatir el cambio climático. Recientemente, las Naciones Unidas lanzó una iniciativa importante que consiste en pagar a los países en desarrollo por reducir la deforestación. El programa conocido como REDD+ (Reducir Emisiones de Deforestación y Degradación) se puede incorporar a los mercados de carbón globales bajo el próximo tratado climático internacional, resultando en mil millones de dólares en pagos de los países más ricos por conservación de los bosques. Sin embargo, a pesar del creciente interés y de la inversión en reducir la deforestación, sorprendentemente se han realizado pocos estudios sobre las maneras más costo-efectivas para hacerlo. Una política popular consiste en pagar por servicios de ecosistemas (PES), donde los participantes reciben pagos si cumplen con un conjunto de condiciones que sean protectoras del ambiente, tales como restringir la tala de árboles en sus tierras. Los programas PES son crecientemente populares debido a su simplicidad percibida en comparación a las intervenciones de conservación alternativas. Es importante evaluar este y otros tipos de intervenciones de reducción de emisiones con el fin de determinar la manera más costo-efectividad para reducir las emisiones de carbón.
Contexto de la evaluación
La pérdida de bosques en Uganda se estima que es cerca de 2 por ciento por año, con una tasa aún más alta en terrenos privados. El proyecto está basado en los distritos de Hoima y Kibaale, las que están ubicadas en la zona ecuatorial de Uganda occidental, y que tienen algunas de las más altas tasas de desforestación en el país. Estos distritos son predominantemente rurales, con una densidad poblacional de cerca de 97 personas/km2 y una población combinada de cerca de 750,000 habitantes. Aunque los efectos medioambientales de la deforestación no se limitan a una porción en particular de la población, el proyecto PES está específicamente destinado a los propietarios privados que tienen bosques en sus tierras ya que ellos son los que tienen derechos de propiedad sobre los bosques locales y pueden determinar si deciden talar o no los árboles de sus tierras. Los propietarios de bosques pueden cortar árboles para desbrozar la tierra para incrementar la cosecha de cultivos comerciales como tabaco y arroz o para vender los árboles como madera o para producción de carbón. Talar los árboles proporciona a los propietarios ingresos, pero es una amenaza para el almacenaje de carbón así como la supervivencia de la vida silvestre local (particularmente para los chimpancés, los cuales están en peligro de extinción).
Detalles de la intervención
Se asignaron aleatoriamente ciento cuarenta aldeas en los distritos de Hoima y Kibaale en Uganda al grupo de tratamiento o bien al grupo de comparación. En las aldeas de tratamiento, los miembros del personal de Chimpanzee Sanctuary y Wildlife Conservation Trust (CSWCT) ofrecieron un contrato con incentivos a cada propietario de tierras de forma individual, bajo el cual ellos recibirían pagos anuales si ellos cumplían ciertas condiciones. A los propietarios se les requirió que se abstuvieran de talar árboles en sus tierras (con algunas excepciones estipuladas en el contrato) y también que reforestaran una porción de la tierra. Los empleados de CSWCT monitorearon el cumplimiento con el contrato realizando chequeos aleatorios en los bosques para buscar indicios de tala.
El estudio medirá el bienestar social y económico así como también los efectos medio-ambientales, y usará imaginería satelital para evaluar los patrones espaciales de los bosques nativos.
Resultados y lecciones de la política pública
Resultados por definir.