Mejorando las interacciones entre niñas y niños, y sus cuidadores a escala gracias a la tecnología
En las primeras etapas del desarrollo infantil surgen persistentes y sustanciales brechas de habilidades entre niñas y niños de varios grupos socioeconómicos. El desafío es diseñar programas correctivos y preventivos costo-efectivos que puedan ampliarse para llegar a más personas. Por ello, las intervenciones que usan tecnología para apoyar el desarrollo infantil están atrayendo cada vez más la atención por su potencial para expandir el alcance de los programas a un bajo costo.
El desarrollo infantil está fuertemente relacionado con la calidad de las interacciones entre madres, padres e hijos durante los primeros años de vida. A pesar de las buenas intenciones de madres y padres, factores como el ritmo de vida acelerado, la inseguridad económica y el aislamiento social pueden magnificar las barreras de comportamiento que impiden las buenas inversiones parentales, tales como la participación en juegos físicos y actividades didácticas, la implicación del padre en la crianza, y la buena relación entre infantes y cuidadores. Esto, a su vez, puede dificultar el desarrollo infantil en áreas como el lenguaje, la salud y el apego emocional.
¿Cómo pueden las y los cuidadores superar estas barreras para mejorar la crianza de niñas y niños?
Barreras de comportamiento
Los estudios de comportamiento han identificado varias barreras de comportamiento que pueden dificultar el desarrollo de un entorno de crianza adecuado
- Sesgo de tiempo presente o altas tasas de descuento. Madres y padres pueden no internalizar los beneficios futuros de su inversión en prácticas de crianza y tomar decisiones cortoplacistas en relación a cuánto tiempo y recursos dedicar a sus hijos.
- Dificultades propias del rol de madre y/o padre, falta de atención y desviación de los recursos cognitivos necesarios para llevar a cabo las tareas parentales. Por ejemplo,el estrés asociado con los problemas financieros y el aislamiento social pueden reducir el autocontrol y consumir los recursos cognitivos necesarios para el cuidado de niñas y niños.
- Sesgo del statu quo. Muchas madres y padres copian, por defecto, los patrones de crianza que experimentaron con sus propias madres y/o padres.
- Identidades negativas. Cuando madres y padres tienen baja autoestima, sienten que no son capaces de influir positivamente en el desarrollo y bienestar de sus hijos.
Aprovechando la tecnología para ayudar a madres y padres
Algunas intervenciones que se enfocan en la crianza—como las visitas domiciliarias donde trabajadores de la salud animan a los cuidadores a interactuar con sus hijos y les instruyen cómo hacerlo—han ayudado a mejorar sus prácticas de crianza. Sin embargo, la mayoría de este tipo de intervenciones son demasiado costosas y o requieren de un control muy riguroso para implementarse a gran escala. El desafío es diseñar intervenciones de bajo costo y factibles de implementar sin facilitadores altamente capacitados.
Based on these challenges and the expansion of mobile technologies even in low-income neighborhoods—and with the financial support of ReachingU Foundation and the Inter-American Development Bank—our team of researchers from the University of Montevideo, the Catholic University of Uruguay, Fe y Alegría, and Fundación América por la Infancia designed Crianza Positiva, a low-cost intervention to support parents of infants and toddlers in their parenting role. One key component of the intervention is a protocolized delivery of text and audio messages to the primary caregiver three times a week for 25 weeks.
Considerando estos desafíos y la expansión de las tecnologías móviles incluso en barrios populares—y con el apoyo económico de la Fundación ReachingU y el Banco Interamericano de Desarrollo—nuestro equipo de investigadores de la Universidad de Montevideo, la Universidad Católica del Uruguay, Fe y Alegría y la Fundación América por la Infancia diseñó Crianza Positiva un programa de bajo costo para apoyar a madres y/o padres de infantes en su rol. Un componente clave de la intervención es la entrega protocolizada de mensajes de texto y audio a los cuidadores principales tres veces por semana durante 25 semanas.
Los mensajes fueron diseñados para abordar directamente las barreras de comportamiento mencionadas anteriormente.
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Los mensajes apuntan a abordar el sesgo de tiempo presente, recordando y resaltando los beneficios de diferentes comportamientos de madres y padres.
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Los mensajes abordan la falta de atención, transformando tareas parentales complejas en simples.
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Los mensajes contribuyen a fortalecer rutinas y forjar nuevos hábitos a través de la repetición, combatiendo el sesgo del statu quo.
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Finalmente, su objetivo es transformar las identidades negativas en positivas ayudando a madres y padres a identificar sus propios recursos.
Evaluación del programa Crianza Positiva
Las personas que participaron en el estudio habían asistido a un taller de crianza de ocho semanas en los Centros de Atención a la Infancia y la Familia (CAIF) de Uruguay (primera infancia de financiación pública y gestión privada). Este taller finalizó en diciembre de 2017. Los resultados de la evaluación fueron prometedores: cuando se combinaron el programa y el taller, encontramos efectos incrementales de Crianza Positiva en la frecuencia de la participación de madres y padres, y en la calidad de la crianza. La intervención también mejoró la calidad de las vocalizaciones de madres y padres en sus interacciones con sus hijos, medido por el rango de su tono de voz (un estilo de habla que alterna los tonos graves y agudos, contribuyendo a captar la atención de la niña y/o niño y a mejorar la comunicación).
En 2020, dadas las restricciones sanitarias del Covid-19, replicamos los mensajes de texto y audio del programa Crianza Positiva, pero sin el componente de taller. No encontramos efectos de la intervención sobre los resultados de interés. Tenemos varias hipótesis detrás de la falta de resultados, que apuntan a cuestiones clave a considerar al diseñar programas similares. En primer lugar, estos programas de mensajería pueden funcionar como complemento de las intervenciones que involucran alguna interacción humana, pero los mensajes pueden tener un impacto limitado en aislamiento. En segundo lugar, los centros CAIF utilizaron activamente los mensajes de WhatsApp para mantenerse en contacto con las familias durante la pandemia, compitiendo con el programa de mensajería por la atención de las familias. Tercero, los problemas introducidos por la pandemia aumentaron el estrés de las familias y potencialmente redujeron la receptividad de las familias a los mensajes.
Un chatbot para el embarazo y reforzar la teleasistencia
Con el apoyo financiero continuo del Banco Interamericano de Desarrollo y en coordinación con las autoridades locales, nos encontramos trabajando en dos nuevos programas:
Programa 1. Llegar a las mujeres con información oportuna, recursos y estrategias de apoyo antes, durante y después del embarazo puede ayudar a prevenir nacimientos prematuros, morbilidad infantil, y mortalidad, y promover desarrollo infantil en general. Actualmente, estamos implementando y evaluando el impacto de un chatbot basado en dispositivos móviles que presentará a las familias información oportuna sobre la atención del embarazo y sobre las etapas de desarrollo y necesidades del recién nacido y las alentará a adoptar comportamientos que mejoren la salud, el bienestar y el desarrollo fetal e infantil.
Programa 2. Este programa consiste en módulos de mensajería electrónica de diferentes duraciones dirigidos a familias con niñas y niños entre 0 y 3 años. El programa se basa en una intervención de teleasistencia que está implementando una agencia gubernamental en Uruguay (Uruguay Crece Contigo). Las familias reciben llamadas de facilitadores una vez por semana por ocho meses. Las y los facilitadorses discuten temas cruciales, así como los mensajes enviados cada semana a la familia.
El camino a seguir
Nuestro trabajo contribuye a la naciente literatura que utiliza la comunicación basada en texto y conocimientos económicos conductuales para impulsar el desarrollo en la primera infancia a escala. Nuestros resultados anteriores y la evidencia anecdótica de nuestras evaluaciones en curso sugieren el gran potencial de estas intervenciones de muy bajo costo, basadas en la tecnología móvil y en la comprensión de los sesgos de comportamiento, para mejorar los recursos de crianza y mejorar la toma de decisiones de madres, padres y cuidadores, particularmente cuando se combinan con actividades que implican alguna interacción con facilitadores humanos.